Hace once años un sueño mío se hacía realidad, el abogado Oscar Rodríguez Kennedy me regalaba un transmisor de Radio en FM, esa misma tarde fui hasta la oficina de Oscar Rubén Cáceres en Radio Cáritas, en el predio del Seminario Metropolitano.
Le pregunté cómo hacer para abrir una Radio comunitaria, me preguntó lo que tenía y le conté, apenas un transmisor y mucho sueño de llevarlo adelante. El nombre ya estaba designado, se llamaría Esperanza FM, el Slogan, también ya estaba pensado “Comunicación y educación para todos”, sería una radio en donde TODOS tuvieran espacio, sin distinción de ninguna laya.
Llegando a casa coloqué la antena en el techo de la cocina por la punta de una tacuara y comencé a transmitir, no tengo la menor idea de cuanta distancia habré abarcado aquel día, pero, con un grabador y algunos casetes que yo tenía, lo puse al aire. Al día siguiente ya vino el señor Rolandi a ofrecer parte del costo de una torre de antena, otro amigo, dueño de una discoteca ya se ofreció para montarla. En fin, la radio se fue haciendo “comunitaria de verdad” de a poco. A Bernardina, mi esposa, no le agradaba mucho la idea estaba embarazada y cualquier cosa era mala para ella, pero aun así me apoyaba.
Vinieron jóvenes sedientos de “conocer” el trabajo en una radio y así se fue formando el primer grupo de operadores y locutores de ESPERANZA FM. Fue una época dura, difícil. Críticas y ataques, por parte de la emisora oficial, tampoco, éramos tildados de “Radio Pirata”, ellos no lo supieron nunca, pero Radio Esperanza FM fue el pionero en Radio Comunitaria en Yby Yaú, estábamos asociados a COMUNICA la red de Radio Comunitarias del Paraguay; Oscar Cáceres, Mirian Candia, Arturo Bregaglio, Cayo Acosta y otros; éramos los primeros “radio-apasionados” unos 73 para ser más exactos.
Anécdotas nunca faltaron en Esperanza FM, todas dentro de lo que se puede llamar un ámbito casi familiar, todos y todas eran mis hijos e hijas. Casetes que eran robados, espacios que nunca se pagaban, deudas por alquiler, en fin. Hasta la persecución cobarde de un cierto político, que en la época tenía peso sobre los comerciantes que nos apoyaban. Les prohibía que nos dieran publicidad. Esperanza FM se fue acogotando de a poco, hasta que no pude más. Debía por teléfono, por equipo de sonido, por materiales discográficos. Como era muy terco, tampoco quise que la Radio se callase, la solución era entregar a alguien que pudiera mantenerlo al aire, allí surgió Carlos Escobar.
Hace nueve años que Esperanza FM emite mensajes de amor y solidaridad. Y hace tres años se convirtió en la Radio símbolo de la ciudad, hace tres años ya no es la Radio que se escucha apenas a “dos cuadras”, como dice un politiquillo de cuarta que también posee una radio en la ciudad, hoy ESPERANZA FM cumple once años de estar al aire y es la radio de los Yby Yauenses que amamos ese pedazo de tierra roja que nos dio amistad, cariño, donde hemos echado raíces haciendo nuestras familias. Radio ESPERANZA FM fue, es y será siempre la voz de los que no tienen voz. Es la radio de los verdaderos Yby Yauenses, diseminados por el mundo entero, porque se le puede escuchar por internet, ya tiene su propio sitio web, un verdadero triunfo para una radio que años atrás estaba condenado a callarse.
Por esas ironías del destino es la radio que hoy grita más lejos.
Hoy soplan otros vientos, yo ya no hago parte de esa historia, pero aun me siento un poco parte de ella y a veces abuso de la paciencia de su actual director Carlos Escobar. Radio ESPERANZA FM cumple hoy once años contando en su plantel con uno de los más emblemáticos locutores de la región, un verdadero maestro: Pedro Ignacio Amarilla.
Alzo mi copa imaginaria y brindo junto a Carlos Escobar, Pedro Ignacio Amarilla, Catalina de Escobar, Dany Escobar, Deo (Juky) Escobar y todos los que componen esa gran familia que hoy es ESPERANZA FM y los animo a que sigan irradiando una luz de esperanza en el aire.
ESPERANZA FM SALUD!!!