Dicen que cuando
alguien que tuvo un cierto poder comienza a perderlo, pierde también la cordura.
Magdaleno Silva nunca tuvo cordura, siempre fue un prepotente y no se puede
perder lo que nunca se tuvo.
Las últimas
informaciones dan cuenta que se la pasa “rezando” en su emisora mau, pidiendo a
la Virgen que castigue a los que le ganaron en los votos pasados (“Ajerure
Tupasyme ko’ava tekove opaga hangua che py’a rasy) (hasta no está explicado
cuando fue la licitación para la frecuencia y de donde provinieron los equipos,
transmisores y todos los accesorios, pregunten a Víctor Bogado) Yo sabía que
Magdaleno era cobarde, prepotente, ladrón y estúpido, pero llorón no sabía.
Un pobre
asalariado tuvo que pagar la friolera de 4 millones de guaraníes para no perder
su empleo porque Magdaleno le amenazó porque había entregado el monto de la
apuesta a una Escribanía, al saber que Magdaleno no estaba dispuesto a
reconocer la derrota.
Pero el circo no
termina allí, Ramonita Mendoza, parlamentaria por el PLRA, ayudó con
transportes y un grueso monto en efectivo a Magdaleno en su campaña, cuál fue
el motivo que impulsó a Ramonita a ayudar a Magdaleno? Fuentes seguras
declararon a nuestra página que Magdaleno también le había ayudado a Ramonita
Mendoza en su campaña. A propósito, Ramonita Mendoza se reunió con los
Liberales de Yby Yaú y les aseguró que Magdaleno Silva apoyará la candidatura del actual concejal municipal Vidal Argüello
para las municipales, con tal de que Elvio no sea el Intendente.
¿Rabia,
Impotencia o pura pichadura porque un “Elvio López” le vuelve a ganar (por
quinta vez según nuestras cuentas) unas elecciones? Magdaleno sabe que Elvio es
un estratega en temas de manipulación de votos, es un genio, ni dudarlo, (él lo
sabe perfectamente porque fue Elvio el que lo subió al poder y va a ser siempre
Elvio el que le gane)
A Magdaleno
Silva aun le espera otra derrota: (que espero poder darle yo alguna vez) ser
demandado por daños y perjuicios morales y su demandante va a ser mi familia,
no me mueve el dinero, me mueve la sed de justicia, este hombre mintió,
manipuló y amenazó toda su vida (incluso a funcionarios públicos de su mismo
partido) y por todo eso tiene que pagar.
No le servirán “tiroteos”
ni mostrar metralletas con el fin de “amedrentar a la población” Una nueva
derrota le espera, y con él a quién se alíe a él. Un aviso para quienes no
quieran ser “manchados de vergüenza”
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